Palmeiras se convirtió este jueves en el último clasificado y en el rival de Colo Colo en los cuartos de final de la Copa Libertadores, tras eliminar en un sufrido partido a Cerro Porteño, que ganó por la mínima, pero no le alcanzó para revertir el 2-0 que lograron los brasileños en el duelo de ida.

Los paulistas, locales en el Allianz Parque, llegaban con la gran ventaja que consiguieron en Asunción. No obstante, una temprana expulsión de Felipe Melo, por un criminal planchazo, condicionó el juego, permitiendo que los guaraníes salieran con todo en busca de un milagro.

El momento de mayor sufrimiento para el "ciclón" llegó a los 50 minutos, pues Rodrigo Rojas tuvo que salir en ambulancia del terreno de juego, tras sufrir un duro cabezazo en un choque con un rival. Su condición es estable y no fue de gravedad el incidente.

Tras el cambio de Rojas, llegó la alegría y la ilusión para Cerro, pues un centro de Santiago Arzamendia se fue en dirección al arco y se coló dentro de las redes, tras una débil intervención del portero Weverton (57').

Con la esperanza de forzar los penales, Cerro insistió y apretó, pero careció de suerte y precisión.

Cumplido  el tiempo reglamentario, el árbitro Germán Delfino agregó ocho minutos de descuentos, los cuales fueron utilizados de forma vergonzosa por Palmeiras, pues sus jugadores se dedicaron a hacer tiempo, evitando que Cerro lograra la remontada. 

La decisión de los brasileños provocó un conato con los paraguayos, quienes reclamaban al árbitro por su nula capacidad de calmar la situación.

Entremedio de la gresca, el volante Deyverson también terminó expulsado, por lo que, junto a Melo, se perderá el duelo de ida ante Colo Colo, que será en un horario que debe definir la Conmebol.

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