El tenista español Rafael Nadal (512° de la ATP) no tuvo mayores complicaciones para debutar con un triunfo en el Masters 1.000 de Madrid al vencer este jueves por un contundente 6-1 y 6-0 al estadounidense Darwin Blanch (1028°).

En poco más de una hora de juego, el ex número uno del mundo demostró que, más allá de sus problemas físicos que lo han tenido alejado del circuito por un largo tiempo, su talento está intacto y así lo demostró en la arcilla de la capital española.

Nadal no dio grandes oportunidades a un joven de 16 años, el que se vio impreciso y nervioso por tener enfrente a un jugador de los pergaminos del mallorquín. Dentro de la pista se vio el margen lógico que iba a tener el partido debido a la diferencia de edad entre ambos oponentes y la experiencia que suma cada uno en el circuito. 

Con rápidos quiebres de servicio, Nadal tuvo el partido a su disposición, tomando ritmo del encuentro que le permite reencontrarse con su tenis en la arcilla madrileña. Eso es lo que busca el tenista español en estos partidos, que el fisico le responda y sumar minutos de cara a su principal desafío: Llegar de la mejor forma a Roland Garros, torneo donde es el multicampeón.

Tras este triunfo Nadal accedió a la próxima ronda del certamen, dónde se enfrentará al australiano Alex de Minaur (11°) y quien viene de eliminarlo la semana anterior en el ATP 500 de Barcelona.