Dani Alves, exfutbolista brasileño que salió en libertad condicional el lunes 26 de marzo luego de pagar una fianza de un millón de euros, por el caso de agresión sexual donde fue condenado a cuatro años y medio de cárcel conversó por primera vez sobre su situación, donde previo a cada fin de semana debe concurrir a realizar trámites judiciales.

“Es lo que me toca. Cada viernes ir al juzgado y ya está. Tampoco tengo mucho más que hacer", declaró el multicampeón con Barcelona en diálogo con El Periódico. 

Alves, que fue visto en el restaurante Mr. Porter, situado en los bajos del Hotel Sir Víctor, de Barcelona, junto a su amigo Bruno Brasil habló con el citado medio, aunque no quiso profundizar sobre el proceso en que está inmerso, apuntando que: "Está todavía judicializado. El partido que tengo que jugar está en los juzgados”. Y agregó que  no tiene “ni idea” cuánto durará todo.

En la entrevista Alves aseguró que de todas formas él sobrevivirá a cualquier desafío que se le presente, expresando que: "Allá donde voy sobrevivo. Yo me adapto a todo porque para mí no es el lugar el que hace a la persona, sino la persona la que se hace al lugar".

El exlateral de la selección Brasileña y FC Barcelona, tiene además que cumplir con otros cinco años de libertad vigilada, alejamiento e incomunicación con la víctima durante nueve años y  seis meses, y una indemnización de 150.000 y el pago de las costas del juicio, por el delito de agresión sexual.