El entrenador de Angers, de la primera división francesa, Abdel Bouhazama, decidió renunciar este martes tras un polémico comentario machista, y su decisión fue aceptada por la dirección del club.

Todo comenzó porque un jugador del equipo, el argelino Ylyes Chetti, está imputado por un tribunal por agresión sexual tras ser denunciado por supuestamente realizar tocamientos a una mujer en una discoteca.

Bohazama, en un intento de exculpar al jugador, dijo a su ahora ex plantel antes del partido del domingo que "no está mal. Todos hemos tocado a las mujeres".

Esas palabras, filtradas a un medio regional, el periódico Ouest France, causaron una enorme polémica el lunes en la ciudad y en el mundo del fútbol francés.

El club reaccionó inicialmente con tibieza y señaló que se trataba más de una "torpeza" del técnico con unas palabras que "se habían sacado de contexto".

Sin embargo, las críticas se agudizaron y ante la presión creciente de colectivos y autoridades, y las críticas en los medios, el técnico decidió dar un paso al costado.