Ya no hay marcha atrás y David Pizarro vive sus últimos días como futbolista profesional. Quedan dos fechas para el cierre del Campeonato Nacional, en el que su club Universidad de Chile puede quedarse con la corona, y repasando su carrera, con éxitos y episodios dolorosos, el "Fantasista" aseguró que siempre tuvo claro que su esfuerzo estuvo dirigido en ayudar a su familia, en especial a hermana Claudia, quien falleció el 2012 tras sufrir una complicada enfermedad genética.

"Gracias al fútbol nosotros pudimos salir de la pobreza, por lo que yo pude hacer pudimos matar el hambre, soy de una familia de pescadores, de sacrificio, el hecho de ver a mi madre y a mi padre verse romper el lomo por nosotros. Yo a los 14 años ya alternaba con el primer equipo (Santiago Wanderers), eran tipos pesados, eso te va dando una constancia de querer hacerlo bien para devolverle la mano a tus padres y es lo que he intentado hacer todo este tiempo, sobre todo para ayudar a la enfermedad de mi hermana", compartió David a Fox Sports, intentándo contener las lágrimas.

"Hoy miro para atrás y se hicieron cosas muy lindas por parte de todos, sobre todo por mi amiga, mi compañera que fue en ese momento Claudia, seguramente donde ella esté en el cielo está muy feliz, hoy le puedo decir que es misión cumplida por todo lo que pude hacer, porque gracias al fútbol cumplí muchos sueños y le pude cumplir muchos a ella", dijo.

Incluso aseguró que estando alejado de la selección nacional, por su automarginación de la Roja tras fallar en su clasificación a Alemania 2006, que la persona más crítica en esa decisión fue precisamente Claudia.

"Mi hermana era mi amiga, era su ídolo, ese tiempo cuando estuve lejos de la selección era la más enojada, ahora me hace falta, cada vez que llamaba a la casa era ella quien contestaba el teléfono, el hecho de que ella ya no esté te enseña a mirar la vida de manera diferente", aseguró.

Pese a los deseos de sus compañeros y de la dirigencia de su actual club para que se mantenga activo, Pizarro seguirá adelante en su decisión de colgar los botines, por ello, pidió que cuando ya no esté dentro de la canchas lo recuerden "como una buena persona, leal, trasparente, atípico de lo que se vive en el mundo del fútbol".

"Ello porque sinceramente a veces nos encontramos con situaciones complejas donde el ganar atre a muchos y el perder por ahí estás al límite de la soledad, entonces repito, agradecido eternamente de mi familia, entorno, amigos, que estuvieron en esa etapa que viví en Valparaíso y a mi hermana misión cumplida, donde quiera que esté, acá al lado mio, porque todo el sacrificio que hice en esta carrera lo hice pensando en ella", resaltó.

El tormentoso retorno

Respecto a su traumático paso por Valparaíso en su regreso a Chile desde Italia, confesó sentirse tranquilo de poder retirarse por opción propia, en contraste a lo que según él intentaron hacer en Santiago Wanderers cuando salió del equipo envuelto en polémicas el 2016.

"La tranqulidad que tengo que hoy día yo estoy dejando el fútbol porque por ahí en su momento intentaron decidir por mí y eso me dolio muchísimo, me sequé mis lágrimas y empecé de nuevo, sabía que chile no me podía ser indiferente por todo lo que viví fuera", aseguró

"Son situaciones que seguramente a mí me marcarán para siempre, porque como ser humano no te lo esperas. Por todo lo que abarca, porque me pasó en mi casa, y esas son situaciones complejas, quizá muchos la entienden y otros no, y logicamente te marca como ser humano más que como jugador de fútbol, pero creo que a mis 39 años me considero una buena persona", sostuvo.

Finalmente, dedicó palabras a su esposa, Carolina Gómez, quien ha sido su gran soporte, y quien seguramente también lo será en su etapa de retiro, "porque dejaré de hacer algo que amo, entonces agradecido totalmente y sé que seguirá siendo el sostén de la famila Pizarro Gómez".