El español Rafael Nadal (3°) señaló que había estado a punto de desmayarse en su encuentro contra el estadounidense Tim Smyczek (112°) en el Abierto de Australia, donde reconoció que casi vomitó tras sufrir "un golpe de calor y algo en el estómago".

"Estaba muy mal y sabía que si continuaba en esa caída física hacia abajo, estaba cerca del desmayo", comentó Nadal tras el partido, que ganó por 6-2, 3-6, 6-7 (2), 6-3 y 7-5 para avanzar a tercera ronda.

"Después, al sacar al principio del tercer set me dieron náuseas, ganas de vomitar y casi vomito, de hecho me ha salido un poquito. Creo que he tenido un golpe de calor importante y algo que me habrá pasado en el estómago, y las dos cosas juntas han hecho que la situación sea crítica", agregó.

"El estado físico era malo y tenia miedo de desmayarme, me notaba la cabeza fuera, y cuando uno esta tan mal, es diferente cuando te duele la rodilla o un pie, pero cuando se encuentra mal en general es un tema de salud y tienes miedo de cruzar la línea", comentó.

"Cuando me movía y hacía tres pelotas, notaba que no podía más, pero aún así he encontrado la manera de relajarme para a partir del cuarto, y dentro del estado crítico que estaba el partido y yo mismo, encontrar la solución desde la agresividad y el entendimiento, sabiendo que la única forma que tenía de ganar el partido era sin correr y encontrar golpes ganadores", expresó el mallorquín.

"Llamé al doctor e hice lo que me dijo, que tomara un gel deportivo, sales minerales, y me dio una pastilla para que el estómago soltara un poco, pero cuando ya llevas hora y media, y no mejoras, entiendes que no vas a mejorar y que el cuerpo no tiene recuperación", añadió.

Nadal dijo que la sensación de hoy fue "mucho peor" a la de la última final de Roland Garros. "Hoy estaba mucho peor. En la final de Roland Garros estaba muy cansado, hecho polvo, pero la sensación física general estaba peor hoy", señaló.