Francisco Lóp ez dio otra muestra de su espíritu deportivo este jueves en el Rally de los Faraones, pues prefirió ceder su muy posible victoria en la cuarta etapa y ayudar a un ex compañero de equipo accidentado.

Este jueves el team Aprilia decidió enfrentar la cuarta etapa por Sahl Bakara con motor y suspensiones modelo 2011, y el chileno cumplió más allá de lo imaginable en una máquina que conoce perfecto: finalizó segundo, a solamente 36 segundos del vencedor del día, el portugués Helder Rodrigues.

El chileno bien pudo ganar la especial de 362 kilómetros, pero a falta de 25 kms. para llegar a la meta presenció la caída del danés Jes Munk -ex piloto de Aprilia- y se detuvo a socorrerlo.

Los jueces de la prueba le devolvieron el tiempo que estuvo detenido, pero no desde que comenzó a bajar la velocidad para ayudar al europeo. Con aquella diferencia, Rodrigues, que no paró porque vio a López colaborando, se anotó la jornada.

"Venía muy fuerte, súper seguro, salimos con la Rally Touareg 2011, conozco de memoria la moto. Fui segundo y debería haber ganado, pero Jes es mi amigo. Pasé por lo mismo hace cinco meses, me da la mismo haber regalado la etapa", confesó el nacional.

Por suerte, el danés sólo sufrió lesiones de menor gravedad y una fuerte contusión, lo que tranquilizó al curicano. "Cuando vas en carrera, ver accidentes desarma la estrategia, te rompe el foco, pierdes la concentración. Es mejor parar, tomarse un tiempo y volver a correr más tranquilo, retomar la velocidad de a poco", indicó.

Bajo ese prisma, el último tramo de competencia fue un trámite. "Dejé de acelerar hasta llegar al bivouac. Sabía que igual estaba metido entre los punteros, así que terminar segundo es excelente. Vinimos a probar alternativas para mi posible ida al Dakar, a recuperar el ritmo en carrera, a motivarme con las exigencias del rally. Fui segundo, las pruebas han sido buenas y malas, Jes está bien. Me quedo tranquilo", analizó López.