Actitud, fortaleza anímica, la capacidad para sobreponerse a situaciones adversas. Todos estos atributos fueron los que resaltó de sus jugadores el técnico de la selección nacional Juvenal Olmos, momentos después de finalizado el empate ante Brasil (1-1) por el torneo Preolímpico.

El seleccionador nacional, que se deshizo en elogios para con la actitud y disposición mostrada por sus pupilos ante los brasileños, manifestó con indisimulado orgullo que Chile fue el mejor equipo de la primera fase.

"Deben reconocerlo. Hay que sentirse orgulloso de estos jugadores, porque metieron lo que había que meter y se brindaron por enteros en la cancha. Creo que Chile fue el mejor equipo de esta primera fase, porque fue el que hizo más goles y el que brindó mayor espectáculo. Ojalá admitiéramos y destacáramos eso", manifestó Olmos en la conferencia de prensa posterior al empate con los brasileños.

Sobre el partido el técnico admitió que el comienzo del equipo fue el más opaco de todos, porque "los jugadores no tuvieron la respuesta anímica adecuada. Fue un partido en que fuimos de muy menos a más. Brasil entró dueño del terreno, de los espacios, de la tenencia del balón y el protagonismo".

"Después del gol y promediando 30 mintuos, perdimos el miedo de enfrentar a la selección más exitosa del mundo. Lamentablemente sufrimos la expulsión de (Jorge) Carrasco y la lesión de (Miguel) Riffo, que nos complicó el panorama sobre el final", añadió.

Olmos profundizó su análisis y si bien admitió que los jugadores nacionales tal vez entraron esta noche con miedo de enfrentar a Brasil, estimó que "todos, incluso los campeones, sienten ese temor escénico, esa angustia del inicio, así que no hay que hablar de miedo como algo peyorativo".

"Lo bueno fue que estos muchachos lograron superar esa barrera, esa abismal diferencia que hubo entre el Brasil del inicio y nosotros. No cabe duda que pusieron los huevos que había que poner", agregó más tarde.

Olmos reconoció que el golpe de timón que efectuó promediando la primera hora de juego al agotar los cambios, ordenando el ingreso de Jean Beausejour, Gonzalo Fierro y Jorge Valdivia, fue "una apuesta sumamente importante". En todo caso, desestimó llevarse el crédito en el éxito final y siguió resaltando la actuación cumplida por sus dirigidos.

Lo que viene

El seleccionador nacional destacó que los días de descanso que ahora tendrá la selección a la espera de su próximo partido (seis días) "nos vendrán muy bien", aunque remarcó que el equipo sufrirá ausencias muy importantes a consecuencia de lesiones y suspensiones.

"Nos ganamos estos seis días, pero no podemos olvidarnos de que no contaremos con Carrasco, Valdivia, por suspensión y probablemente Riffo, que se resintió del esguince al tobillo que sufrió hace dos semanas", explicó.

En todo caso, Olmos confía en que recuperará a todo el resto de los jugadores que ha manifestado cierta fatiga, a consecuncia del intenso trajín que ha tenido el plantel con tanto partido consecutivo.

"No es habitual jugar esta cantidad de partidos seguidos ni a la exigencia que implican, pero creo que vamos a llegar bien al primer partido de la siguiente etapa. Vamos a hacer todo lo que está al alcance para la recuperación de los jugadores", expresó.

Olmos finalmente manifestó su agradecimiento por la calurosa acogida y gran aliento brindados por el público de la Octava Región, al tiempo que exteriorizó su esperanza porque la hinchada de la Quinta (específicamente de Valparaíso y Viña del Mar, donde se jugará la siguiente etapa) se comporte de la misma forma.