Gustavo Álvarez, técnico de la Universidad de Chile luego de la derrota en el clásico ante la UC, se mostró molesto por la lesión que sufrió Ignacio Tapia previo al partido y que tuvo que reemplazar de emergencia por David Retamal.

El adiestrador señaló que esta situación “me cambió la estrategia, tenemos que ser más cuidadosos con eso. Tapia arrastraba una molestia desde ayer que me enteré en el momento del partido. Tenemos que ser más cuidadosos con eso puertas adentro. Me molestó”.

Gustavo Álvarez: “tendremos que resolverlo puertas adentro”

Álvarez profundizó sobre este hecho, que consideró que “hubiera esperado un procedimiento más prolijo a enterarme antes. Es una situación que tendremos que resolver puertas adentro”.

Esta lesión tan encima le modificó lo planificado apuntó Álvarez. “David se enteró cinco minutos antes de jugar, entró, si bien entrena para jugar en esa posición, la mente del futbolista  que va de titular respecto del que va al banco es competitiva, pero no es la misma. Nosotros habíamos entrenado otra cosa”.

El entrenador de la U fue consultado si lo que pasó se lo comunicó el jugador o se lo ocultó alguien: “no importa quién, pero  me sorprendió y me molestó”, fue la escueta respuesta de Álvarez.

Álvarez: “no arriesgo jugadores”

El técnico de la U añadió que su molestia pasa porque “estamos preocupados de todos los detalles, somos muy cuidadosos con las cargas en los días de trabajo, y así se reduce el margen de improvisación, por eso digo que es algo que debemos resolver puertas adentro, no soy un técnico de improvisar y esto fue un acto de irresponsabilidad”.

Por último Álvarez planteó que él no es de arriesgar jugadores: “la responsabilidad de poner o no a un jugador es mía. Pero el riesgo es compartido, porque un jugador que juega con una molestia se puede lesionar peor. Salvo que sea una final yo a nadie arriesgo, lo hago por la salud del jugador”, remató el entrenador de los “azules”.