Un gran susto se vivió en el partido entre Udinese y Roma por la Serie A del Calcio Italiano. Evan Ndicka se cayó al suelo en el minuto 71 sin haber recibido ningún golpe y tocándose el costado izquierdo. Lo que vino después, fueron minutos de mucha tensión, ya que las señales para que ingresara la ayuda médica que hacían jugadores y árbitro, daban a entender que era algo relativamente grave.

Smalling iba a ingresar para reemplazar al jugador, pero Danielle de Rossi le pidió al árbitro no seguir con el partido hasta saber del estado de salud de su dirigido. Las caras de preocupación en la cancha, eran evidentes, incluso su compañero Romelu Lukaku no pudo contener las lágrimas.

Finalmente ambos equipos decidieron suspender el partido, que hasta ese minuto iban 1-1 con goles de Pereyra a los 23' y Lukaku a los 64'. De Rossi insistió en que "no podemos seguir jugando el partido y que en otra parte haya un desenlace fatal".

En redes sociales, la Roma informó que el jugador de 24 años "está consciente y ha sido trasladado al hospital Santa Maria della Misericordia para ser examinado". Pero según informan medios italianos, el electrocardiograma dio un resultado preocupante. La Gazzetta dello Sport señaló que Ndicka sufrió un infarto.