Paraguay se retiró en escandalosa final del Mundial de talla baja ante Argentina
La selección guaraní dejó de jugar tras acusar una agresión desde la tribuna de la hinchada trasandina.
El Mundial de talla baja que se disputó en Buenos Aires terminó con escándalo, ya que Paraguay se retiró en el primer tiempo de la final contra el anfitrión Argentina, que terminó coronándose de forma polémica como campeón.
El partido iba 3-1 a favor de los locales en el Estadio Polideportivo Islas Malvinas, pero los guaraníes dejaron el terreno de juego cuatro minutos antes del final del primer tiempo, ya que un jugador acusó que recibió un escupo desde la platea local.
Además, los paraguayos estaban furiosos, sintiéndose perjudicados por los cobros arbitrales constantes a favor de los trasandinos.
La decisión de Paraguay fue respaldada por delegaciones de Brasil, Colombia y México, que estaban presenciando la final.
Los jugadores de Argentina esperaron en la cancha para reanudar el encuentro, pero los paraguayos sólo regresaron para agradecer a los hinchas de su país, que habían ido a apoyarlos en el recinto de boanerense.
"Con el equipo decidimos no jugar. Es muy obvio el robo que nos hacen. A mí compañero le dio en la cara y nos cobraron mano. No puede ser. Ganamos con huevo y con ganas, no robando", declaró el arquero de Paraguay, Eduardo Martínez, tras la final.