Luego de la controversial acusación de abuso sexual en contra de Dani Alves, el medio español El Periódico, accedió a los informes de las cámaras de seguridad. Los registros desmintieron la defensa del brasileño, revelando que estuvo cerca de 15 minutos encerrado en el baño de la discoteca con la denunciante del hecho.

Este descubrimiento contrastó con las tres declaraciones del lateral a lo largo del caso. En primer lugar, reconoció estar en la fiesta y negó la agresión sexual. Más tarde, comentó que no conocía a la chica y finalmente terminó afirmando que ella fue quien lo acosó aquel día.

Alves ya vivió sus primeras horas al interior de la cárcel y, según medios catalanes, el futbolista ha estado muy afectado anímicamente pese a ser visitado por especialistas médicos y psicologicos. Además, ABC especificó que su ingreso fue como el "de cualquier otro preso, pese a la parte mediática" y que no recibirá ningún trato especial.

El reporte de Marca indicó que la jueza a cargo del caso consideró el riesgo de que el futbolista se escape para "sustraer la acción Judicial". Pues la magistrada apeló a la capacidad económica que posee el lateral, su doble nacionalidad brasileña y española; y su residencia en México.

A eso se le agrega que Brasil no tiene convenios de extradición con España, incrementando las sospechas de una fuga para refugiarse en su país. Con esto, no existiría opción de regresar a la nación europea, lugar donde cumple su condena.