El mediocampista chileno de origen argentino Luciano Cabral fue oficializado como uno de los nuevos refuerzos de Coquimbo Unido, traspaso que le otorga una opción para relanzar su carrera, luego de estar tras las rejas al otro lado de la cordillera.

Con pasos por Comisión de Actividades Infantiles (CAI) en Segunda División, y un préstamo como juvenil de River Plate, debutó en Primera División defendiendo a Argentinos Juniors durante 2011, elenco donde destacó por su habilidad. Sus condiciones lo llevaron a jugar por la Roja en el Sudamericano Sub-20 2015, ya que tiene doble nacionalidad por parte de su abuelo materno.

A mediados de 2016 dio el salto internacional, pues fue cedido por un año a Atlético Parananese de Brasil, sin embargo, un hecho en sus vacaciones truncó la presencia del mediocampista en las canchas.

El 1 de enero de 2017 se vio involucrado en el homicidio de Joan Villegas, de 26 años, producto de una pelea callejera en la que también participaron algunos primos y su papá, José Cabral, que se declaró culpable.

Paranaense dio por terminado el préstamo, mientras Luciano se encontraba detenido, indicando en una entrevista que "no tenía nada que ver". Finalmente, en junio de 2018, el jugador fue condenado a nueve años y medio de cárcel por homicidio simple, mientras que su padre recibió una pena de 16.

El mendocino pasó cuatro años en reclusión, hasta que obtuvo la libertad condicional el pasado 15 de septiembre por buena conducta. Argentinos, su antiguo club, le abrió las puertas para entrenar y tratar de buscar alguna opción de volver en el césped.

Luego de abandonar la cárcel, el volante expresó que deseaba vivir en Chile por miedo a represalias, "en contra mía y de mi familia, porque hoy tengo hijos", según contó a La Tercera. 

En ese contexto llegó el interés de Coquimbo. "Las segundas oportunidades como entrega nuestro club y la posibilidad de retomar nivel tienen a Luciano Cabral como nuevo refuerzo porteño", destacaron los "piratas" en su presentación.

Así, Cabral buscará brillar y retomar su carrera futbolística con un contrato de dos temporadas. Disputará su lugar en un puesto marcado por la compleja lesión de Joe Abrigo, figura del equipo, cuyo retorno se espera apróximadamente en abril o mayo, tras varios meses de recuperación.