Denis Shapovalov venció a Thanasi Kokkinakis y acercó a Canadá al título de la Copa Davis
El canadiense le dio el primer punto a su país ante Australia.
Después de encajar sendas derrotas en sus dos primeros partidos individuales en Málaga, el canadiense Denis Shapovalov (18° en la ATP) dio por fin un punto a su país, al ganar en el primer choque de la final al australiano Thanasi Kokkinakis (95°), por 6-2 y 6-4, y colocar así al equipo norteamericano a un solo paso de su primera Copa Davis.
Cuatro días después de debutar en la final a ocho, Shapovalov se centró. Abrió el partido con dos quiebres consecutivos y se encontró con un 4-0 que le dio alas para seguir arriesgando y margen para hacerlo con sentido. Todo lo que ensayaba, la volea, la dejada, el paralelo, le salía bien. En 33 minutos tenía el set en el bolsillo.
Kokkinakis, que también había caído en su único partido anterior, perdió la paciencia y prodigó gestos de enfado e impotencia, pese al apoyo entusiasta de su capitán, Lleyton Hewitt, cada vez que se sentaba en el banco.
Aunque conservó su primer saque en el segundo set, volvió a ponerse en desventaja a perder el siguiente. Tuvo tres ocasiones de hacer el 'contra-break', pero Shapovalov mandó la zurda a funcionar y, aunque alternó con errores graves, mantuvo la ventaja hasta cerrar la victoria.
Los dos números uno de sus respectivos equipos, Felix Auger-Aliassime (6° ATP) y Alex de Miñaur (24°), jugarán el siguiente punto en el Palacio de los Deportes Martín Carpena de Málaga. El canadiense ganó este año en Cincinnati fácilmente en dos mangas.
Los capitanes, Hewitt y Frank Dancevic, anunciaron que, en caso de tener que desempatar en el partido de dobles, lo jugarán Auger-Aliassime/Vasek Pospisil y Max Purcell/Jordan Thompson.
La final enfrenta al segundo equipo más veces ganador de la Davis, Australia, con 28 títulos, y a otro que nunca la ha ganado y que juega su segunda final. En 2019 los canadienses perdieron el partido definitivo ante España en Madrid.