El serbio Novak Djokovic (8° del ranking mundial) se proclamó este domingo maestro de maestros al conquistar el título de las Finales ATP en Turín, luego de derrotar en sets corridos al noruego Casper Ruud (4°). 

La contienda no se le dificultó en demasía al balcánico, que consiguió superar a su rival en tan solo una hora y 34 minutos de juego, por parciales de 7-5 y 6-3. 

"Nole" recoge así la corona del alemán Alexander Zverev, tras haber fulminado durante el torneo al griego Stefanos Tsitsipas, a los rusos Andrey Rublev y Daniil Medvedev, y al estadounidense Taylor Fritz.

En el partido, el de Belgrado fue mucho para Ruud. Enchufado, rápido, certero y con avidez, se llevó una primera manga muy igualada y en la que Ruud cedió, de nuevo, ante un grande del circuito. Pudo ponerse por delante muy pronto, en el segundo juego, pero desaprovechó su doble oportunidad de rotura y mantuvo la igualada. Volvió a disponer de otro 'break' para ponerse 5-3 arriba, pero Ruud aguantó la embestida, cerrando el puño cuando mantuvo el saque, liberando algo de tensión.

No destacó el de Oslo por mostrar emociones en la pista. Ni positivas ni negativas. Ni dentro de la pista ni fuera. Pero se le notó incómodo camino a su asiento, como si supiera que tenía casi imposible remontar a su rival, mirando a su banquillo en busca de una solución que nunca llegó y pensando, quizá, en las otras tres finales que había perdido a lo largo del año.

Concretada su victoria, Djokovic levantó su sexto título de las Finales ATP, gloria que no conocía desde 2015 y que lo hizo igualar al suizo Roger Federer como los más laureados de esta competición. 

Además, puso el trofeo 91 en su palmarés y desembolsó el mayor premio económico en la historia del tenis, con 4.740.300 de dólares.