La salida anticipada de Arturo Vidal de Inter de Milán se está entrampando por los problemas económicos que atraviesa el club, que para acelerar la despedida del chileno debe pagarle 8,5 millones de su último año de contrato (vence en 2023) y otros 4 correspondientes a una cláusula de recisión.

Sin embargo, según adelantó La Gazetta dello Sport, el cuadro "neroazurro" no tiene las condiciones monetarias y espera que Vidal renuncie al monto correspondiente a su último año de contrato y rebaje sus pretenciones con la cláusula. 

Dicha disputa, de la que Vidal aún no se ha referido, puede afectar su más que inminente salida del equipo, ante el notorio interés de Flamengo de Brasil y a los recientes rumores surgidos desde Qatar, donde Al-Rayyan, equipo dirigido por el chileno Nicolás Cordova y en el que milita su amigo James Rodríguez, quiere contar con sus servicios por un millonario contrato de 8 millones al año. 

Por el momento, Arturo Vidal se mantiene en Inter a la espera de que pueda resolver sus conflictos económicos para definir su próximo destino.