El técnico portugués de AS Roma, José Mourinho, se quejó, otra vez, del césped artificial del estadio de Bodo Glimt de Noruega, su rival en cuartos de final de la Liga Conferencia, y aseguró que el fútbol sobre este tipo de superficies "es un deporte diferente".

Mourinho vuelve al estadio Aspmyra, en Noruega, para disputar la ida de cuartos de final frente a Bodo Glimt, equipo ante el que sufrió una sonrojante derrota por 6-1.

Ya en aquel partido el técnico dijo que el césped, artificial por el clima de la zona, era "horrible".

En la rueda de prensa previa al encuentro de cuartos de final, aseguró que sigue pensando lo mismo.

"El fútbol se juega en césped natural, no en césped artificial. Es un deporte diferente. Es un deporte completamente diferente. Eso es todo. Entiendo que el clima es muy duro, pero también me quejo a veces, incluso cuando jugamos en casa", dijo.

"Somos muchos los que no estamos contentos con eso. Pero mira, no hay excusas: el clima es el clima y el campo es el campo. Tenemos dos partidos para llegar a la semifinal y tenemos que concentrarnos en eso. Y, de nuevo, también respetar a Bodo como equipo. Porque es un buen equipo", señaló.

"Jugaron en Roma en césped natural y jugaron bien. Son muy buen equipo. No es porque estén acostumbrados a los campos artificiales y nosotros no", sentenció.