Nuevamente en el ojo del huracán. Pepe, central brasileño naturalizado portugués, fue expulsado el pasado viernes en el duelo de Porto contra Sporting de Lisboa, pero el informe del árbitro puede acarrear una dura sanción para el futbolista.

El medio A Bola tuvo acceso al documento escrito por el juez João Pinheiro, y reportó que el zaguero "dio un puntapié a un director del equipo adversario, cometiendo un acto de conducta violenta".

Pepe arriesga un castigo que puede ir desde dos meses hasta dos años, pues las agresiones de jugadores "contra miembros de los órganos deportivos, dirigentes o delegados de otros clubes" son una infracción disciplinar grave estipulada en el reglamento del balompié luso.

Bruno Tabata, de Sporting de Lisboa, también puede ser castigado bajo la misma causal, ya que el informe referil lo apuntó por golpear a Luís Gonçalves, director general de Porto.

El partido entre "leones" y "dragones", que terminó 2-2, tuvo cinco tarjetas rojas. Sebastián Coates se fue anticipadamente al inicio del segundo tiempo, y en los descuentos Tabata, Joao Palinha (Sporting), Pepe y el arquero Agustín Marchesín (Porto) fueron expulsados por una pelea.