Pese a haber quedado eliminado del cuadro individual del Abierto de Australia ante Daniil Medvedev (2° de la ATP) en la segunda ronda, el local Nick Kyrgios sigue dando de qué hablar en el certamen al trasladar sus shows a la categoría de dobles.

En esta ocasión, el australiano se impuso junto a su compañero Thanasi Kokkinakis a la pareja formada por el alemán Tim Puetz y el neozelandés Michael Venus para avanzar a las semifinales del primer Grand Slam del año.

Sin embargo, durante el partido, el oriundo de Canberra volvió a sobresalir por un episodio de furia que preocupó a todos, pero tras la acción del tenista local terminó con los aplausos y la ovación de todo el recinto.

La jugada en cuestión se produjo durante el cuarto juego cuando Kokkinakis malogró su primer saque. Michael Venus devolvió el tiro mientras el umpire anunciaba que la jugada había sido anulada por let. La pelota fue directo a la zona donde se encontraba Kyrgios que, pese a escuchar la decisión de la jueza, continuó con la acción y remató con fuerza.

Su tiro fue a parar directo a la cabeza de un niño que estaba mirando el partido desde la grada. Las miradas se voltearon rápidamente hacia el pequeño que comenzó a llorar al sentir el impacto, y cuando el tenista se dio cuenta de lo que había sucedido, su cara demostró su total arrepentimiento.

El juego se detuvo durante unos segundos para chequear que todo estuviera bien con el pequeño, hasta que finalmente Kyrgios pidió un tiempo para hacerle un regalo a modo de disculpas.

Fue entonces que tomó una raqueta de su bolso y se dirigió al sector de la grada en donde se encontraba el niño con su familia. Entre aplausos y ovaciones el pequeño recibió el regalo y sus lágrimas pasaron de dolor a alegría por el inesperado obsequio.

Mira acá la acción