La estrella estadounidense Simone Biles lideró con su brillante nivel la clasificación en la gimnasia artística de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, aunque dejó una cuota de duda por su "irregular" presentación en la prueba de suelo.

Biles, una de las participantes más esperada en la cita de los anillos, debutó en el pabellón Ariake con una nota de 14.133, baja para su condición, debido a una salida de tapiz en el ejercicio de suelo, apartado donde no ha perdido competición desde el año 2013.

De hecho, fue superada en la nota por la italiana Vanessa Ferrari, con un 14.166.

También en salto sacó un pie del carril en su primer intento. Tras el medio giro que dio al salir de la rondada, encaró el potro algo ladeada y aterrizó a la izquierda. Su segundo salto fue mucho mejor, clavado, y obtuvo una media de 15.183 que la colocó en cabeza.

Estuvo correcta en las asimétricas, aunque con la menor exigencia de su ejercicio se quedó en 14.566, y en barra se quedó en 14.066.

Apoyada en sus notas de suelo y salto, pese a los errores, Biles es provisionalmente primera en la general individual, seguida de Sunisa Lee y de la rusa Angelina Melnikova.

Consignar que Biles, reina de Río 2016, defiende en Tokio los títulos olímpicos en individual absoluto, de suelo, salto y por equipos.

Ese último plano, Biles también sufrió una decepción en la clasificatoria, ya que el equipo estadounidense terminó segundo, por detrás de Rusia.

Las norteamericanas Biles, Sunisa Lee, Grace McCallum y Jordan Chiles sumaron 170.562 puntos que no fueron suficientes para mejorar los 171.629 de las rusas.