Matías Rodríguez, capitán de Universidad de Chile, aseguró que en la vuelta ante Internacional de Porto Alegre deben mantener la concentración que les permitió empatar 0-0 en el Estadio Nacional, pues la llave está abierta. 

"Creo que al final fue positivo por como se dio. En el segundo tiempo con la expulsión se nos complicó un poco. Walter (Montillo) era el hombre que se juntaba con Aránguiz y nos daba el juego", apuntó. 

"Tuvimos que replegarnos y estar bien parados para que nos hagan goles. Nos propusimos la meta de que nos hicieran goles y gracias a Dios se dio como queríamos", agregó el lateral. 

En cuanto a la expulsión asegiró que "no fue para amonestación. Ojalá el club haga los esfuerzos para revertir la segunda amarilla a Montillo porque fue injusta". 

Asimismo, sobre el partido aseguró que "todo equipo brasileño tiene jugadores rápidos y desequilibrantes. Ellos tienen a (Andrés) D'Alessandro que en cualquier momento te mete una pelota de gol y a Paolo Guerrero que estaba metido en el área, pero creo que lo pudimos controlar".

En esa línea, y pensando en la revancha del próximo martes en Porto Alegre, advirtió que "ellos tuvieron una sola en el segundo tiempo que saca Fernando, este es el camino. En la vuelta debemos estar concentrados, la llave está abierta todavía"

Rodríguez, finalmente lamentó los incidentes ocurridos en la galería sur del Estadio Nacional, los que tuvieron en peligro la disputa del partido. "No nos gusta que pasen este tipo de cosas, pero gracias a Dios se pudo terminar el partido, porque eso puede ser una sanción mayor para nosotros", indicó.

"Uno trata de abstraerse de lo que pasa porque hay que concentrarse en jugar, pero uno no es ajeno y ve las cosas que estaban haciendo y no nos gusta. Esperemos que recapaciten", cerró.