El director deportivo del Real Automóvil Club de Cataluña (RACC), Amán Barfull, aseguró este jueves en Madrid, que el Rally de Cataluña, que se disputará en Tarragona del 24 al 27 de octubre, "no corre ningún riesgo".

"Estamos trabajando con toda normalidad" aseguró y en referencia a las protestas y altercados que se viven por la geografía catalana tras el fallo de la sentencia del "proces", puntualizó que quedan lejos de Port Aventura y Costa Dorada, donde se desarrolla la prueba "son hechos que están centrados en Barcelona, no tienen por qué afectar".

Amán, recordó que la prueba, que cumple 55 años, vivió una situación crítica en el 2017, por la declaración de independencia. "Sufrimos una huelga general, la misma semana del rally que, logísticamente, sí nos afectó", por lo que en esta ocasión la situación es "más favorable."

La organización coordina, como cada año, el dispositivo con los mossos de escuadra, desde siete meses antes de prueba y revisa con los mandos tramo por tramo la carrera, por lo que la situación es de "absoluta normalidad".

En el acto de presentación, en la sede del Consejo Superior de Deportes, de la 55 edición que será la última que se disputará en superficie mixta de tierra y asfalto por la nueva normativa, el RACC contó con el apoyo de la Real Federación Española de Automovilismo, a través de su presidente Manuel Aviñó quien no contempla una alternativa en caso de incidentes, ni mover la ubicación en la próxima edición en el 2021.

"Estamos convencidos que la prueba saldrá adelante. El deporte español ha sabido demostrar siempre que está por encima de las cuestiones políticas", dijo.