"Crisis de juego"en letras grandes es el concepto que mejor refleja el momento que vive hoy Colo Colo. Y es que el equipo va en caída libre y tiene que amortiguar el golpe, que puede ser muy duro.

Si se quiere mirar desde lo numérico:
- Está a 14 puntos del líder.
- Está fuera de la zona de clasificación a la fase grupal de la Copa Libertadores.
- Desde el receso en siete jugados, suma cuatro derrotas, dos empates y solo una victoria

Las cifras son el reflejo de un equipo que nunca ha despegado en el ciclo de Mario Salas. No existe un partido para que quede en el recuerdo.

Solo es combativo, va al frente, quiere ser protagonista, refleja lo que quiere el DT en ese aspecto pero no ha tenido luces en ataque.

Y llega el momento de ser muy realistas: hoy Colo Colo no tiene los intérpretes para ejecutar la idea de juego de Salas.

No hay volantes que sostengan el ida y vuelta pero que además sean determinantes en los metros finales, con habilitaciones o llegando al gol.

Y los delanteros, salvo momentos de Pablo Mouche, Marcos Bolados e Iván Morales, no ganan duelos individuales

Pobre temporadas de los llamados a liderar el equipo: Julio Barroso, Juan Manuel Insaurralde, Carlos Carmona, Jaime Valdés, Esteban Paredes y Jorge Valdivia difícilmente llegan a la nota 4 en este 2019.

El momento es duro, incluso desde el ya manoseado posible récord de Paredes, algo que a esta altura es casi un estorbo. Es una distracción dentro y fuera de la cancha.

Además, el sueño de que el "Mago" vuelva y arregle todo es otro autoengaño. Lesiones, puesta a punto física y una expulsión inentendible lo tienen como un fantasma. Poco ha mostrado en el 2019 y ya será difícil que lo haga.

Llegó el momento de poner la pelota al piso y que Mario Salas genere movimientos en la organización del equipo y en los nombres para intentar salvar la temporada.

La temporada está en un momento crítico, donde se necesita una reacción. Para eso están los directores técnicos. Si todo sigue igual, será difícil ver a Colo Colo en la Libertadores.

Salas tendrá que demostrar que su repertorio no tiene un solo plan. El equipo necesita urgente encontrar un nuevo camino.

Las opciones pueden ser en la organización del equipo, potenciando la seguridad defensiva y nuevas variantes para acercarse al gol.

Dos volantes centrales, laterales con menos despegue o salir más a la contra apostando a la velocidad, pueden ser algunos caminos, pero aunque Mario Salas de el paso y deje a un lado su convicción por una idea de juego, igual está duro para Colo Colo.