El ex productor artístico de Luis Miguel Matías Mc Cluskey contó que en 1988, cuando el artista tenía 18 años, lo llevó a presenciar un partido de Boca Juniors en La Bombonera y éste "alucinó" con la hinchada del conjunto xeneize.

"Siempre fue un tipo muy divertido, picarón. Le gustaba la adrenanalina y le encantaban todos los eventos multitudinarios. Conseguimos unas entradas para la platea alta y, aunque él no era ningún fanático del fútbol, ni lo dudó. Le encantó la idea de ir", dijo Mc Cluskey al medio Olé.

Para asistir al encuentro, Luis Miguel necesitó camuflarse debido a que ya era reconocido a nivel sudamericano, por lo que "se puso un gorro de lana, una bufanda y los anteojos más grandes que tenía. Era irreconocible",

"Alucinó con la hinchada. 'No paran', me decía", continuó su ex productor; "En un gol de Boca, típico de la cancha, el que estaba adelante se dio vuelta y le dio un tremendo abrazo. Luismi no entendía nada, se cagaba de risa y me dijo: 'si supiera que me está abrazando a mí...", terminó su relato.