Shaquem Griffin se transformó en el nuevo ejemplo de superación en el deporte de Estados Unidos luego de ser elegido en el draft de la NFL por Seattle Seahawks pese a no tener su mano izquierda.

Griffin sufrió la amputación de su extremidad luego de que durante el embarazo se enredara en una fibra, lo que hizo que esta se atrofiase y quedara incapacitada para desarrollarse.

Sin embargo, ello no mermó el deseo de Griffin por jugar fútbol americano y junto a su hermano gemelo Shaquill fueron entrenados por su padre, Terry, quien no hizo diferencias y los entrenó a la par con la ilusión de llegar a la universidad.

Shaquem generaba dudas entre los veedores, no obstante, la Universidad de Florida Central se la jugó y reclutó a los hermanos Griffin. Ambos fueron figuras del equipo y Shaquem se las ingenió para aprender a tacklear e incluso a recibir pases: el resultado fue increíble, sumando 195 jugadores derribados, 18 atrapadas y otros datos que hablan del esfuerzo del joven.

Ya en el proceso de captación de la NFL –previo al draft- corrió 40 yardas (36 metros) en 4"38, el mejor registro en una década, y con una prótesis levantó 102 kilos en 20 ocasiones.

Los Seahawks emularon a Florida Central y luego de haber elegido a Shaquill en 2017, ahora sumaron a Shaquem, por lo que ahora busca un espacio en el equipo que afrontará la nueva temporada.

"Es momento para trabajar y asegurarnos que aporto una gran competencia. Debo asegurarme que doy a los entrenadores la oportunidad de ver quién soy, asegurarme que puedo hacer lo mejor y que puedo hacer mejores a los jugadores y ayudar a todos los que pueda", comentó tras ser elegido.