Santiago Wanderers fracasó en su más importante objetivo ante Unión La Calera y fue condenado a descender a la Primera B, resultado que según el entrenador de los porteños, Nicolas Córdova, es su más momento más amargo en el fútbol.

"Ha sido el momento más triste que he vidido en el fútbol. Han sido seis meses (desde que asumió la dirección técnica) de muchas dificultades, muy difíciles... no tengo muchas palabras. Simplemente no estuvimos a la altura de la situación", reconoció el DT en conferencia de prensa.

Sin embargo, el estratega acusó que parte de la responsabilidad en el desenlace fue de Gabriel Castellón. El golero, a los 90+3', sorprendió al "Elías Figueroa" con un error que dejó un gol en bandeja a Rafael Viotti.

"Me parece que fue un error grosero, y después todo lo que conlleva, los penales, la presión, y termina todo en esto", admitió, luego que la diana dejara la serie igualada 1-1 y forzara la definición desde los 12 pasos.

Ante la dicotomía de tener que disputar la Copa Libertadores 2018 y jugar en la Primera B nacional, el técnico dijo que por ahora no puede dedicar pensamientos en ello, pues la tragedia que ahora vive el club lo supera.

"La verdad es que nisiquiera me había puesto a pensar el año que viene. Es una pena tremenda, nos hicimos cargo de un fierro muy caliente, es responsabilidad de quien habla, pero viene desde antes. En la búsqueda de eso como cuerpo técnico no pudimos lograr el único objetivo que teníamos", cerró.