Tras un año de haberse jugado el partido entre Chile y Bolivia en el Estadio Monumental, el TAS entregó su veredicto tras la apelación que realizó la Federación Boliviana luego de que la FIFA le descontara el punto que sumó en aquel partido por alineación indebida del paraguayo Nelson Cabrera.

El 6 de septiembre de 2016 fue el día en el que se originó todo. Chile recibió en el Estadio Monumental a Bolivia por la octava fecha de las Clasificatorias a Rusia 2018 y brindó una de sus más pobres actuaciones de la era Juan Antonio Pizzi, en un encuentro que acabó igualado 0-0.

El duelo es más recordado por las constantes caídas del portero Carlos Lampe, que poco tiempo después recaló en Huachipato, más que por el episodio que aún hacen que ese encuentro esté en el ojo de todo Sudamérica. El ingreso del defensor argentino Nelson Cabrera.

Nacido en Paraguay, el espigado central tuvo un largo recorrido antes de llegar al fútbol altiplánico, incluyendo un poco alegre paso por Colo Colo. A Bolivia llegó el 2013 para jugar en Bolívar y tres años después haría su debut en la selección.

Hasta ahí todo marchaba bien, excepto por una razón: Cabrera aún no cumplía por el plazo estipulado por la FIFA para que un jugador nacionalizado pueda defender a una selección. El organismo indica que un futbolista debe vivir al menos cinco años en el país para poder ser seleccionado, algo que el zaguero formado en Olimpia no cumplía.

Pese a esto, el jugador disputó la Copa Centenario de Estados Unidos sin que nadie repare en esta falta reglamentaria y luego disputó los duelos ante Perú y Chile, encuentros en los que Bolivia logró sacar cuatro puntos que fueron posteriormente descontados.

En aquella noche, el técnico Angel Guillermo Hoyos, hoy en Universidad de Chile, mandó al terreno de juego a los 77 minutos de partido a Cabrera sin saber que casi un mes después aquello significaría la pérdida del punto ganado en Macul.

Sí, porque fue recién a principios de octubre cuando medios bolivianos consignaron la mala utilización del zaguero y Bolivia decidió borrar al jugador de la nómina para la fecha doble que se estaba por disputar.

La información tuvo repercusión inmediata en Chile y Perú  que a las horas ya habían realizado la correspondiente impugnación ante la FIFA, pese a los alegatos de los altiplánicos de que este reclamo se realizó fuera de los plazos estipulados por el ente mayor del fútbol mundial.

El 1 de noviembre llegó la sanción para Bolivia por el incumplimiento del artículo 55, apdo. 1 del Código Disciplinario de la FIFA (CDF) y el art. 8 del Reglamento de la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018, que les significó además de la resta de cuatro puntos una multa de 12.000 francos suizos.

Las consecuencias fueron variadas. Chile subía en la tabla gracias a los dos puntos sumados, mientras que Perú volvía a soñar con llegar al Mundial por los tres puntos recibidos.

En Bolivia el sueño mundialista terminaba definitivamente, arrastrando con ello la renuncia de dirigentes y la posterior salida del técnico quien prefirió emigrar a Universidad de Chile poco después.

En el resto de Sudamérica la resolución de la FIFA no cayó muy bien y fue la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) la primera Federación en reaccionar, pidiendo a la FIFA que revisara la sanción impuesta a Bolivia, sumándose más tarde Ecuador, Colombia y Uruguay.

La Federación Boliviana de Fútbol (FBF), apoyada por los mencionados países, determinó apelar a la FIFA, pero la entidad se mantuvo firme en su determinación razón por la que el bloque decidió recurrir al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).

El 2 de marzo de 2017 se confirmó la presentación de esta apelación y desde ahí comenzaron todo tipo de especulaciones respecto a la determinación que se tomaría, dándose como plazo definitivo el 31 de agosto, aunque esto jamás fue oficializado desde el TAS.

El apoyo de Ecuador, Uruguay, Colombia y Argentina se hizo oficial, siendo los trasandinos los que más interés pusieron ante la posibilidad de perder ante Chile la opción de conseguir un cupo directo al Mundial de Rusia 2018. El TAS aceptó la participación de estas Federaciones en los alegatos.

En tanto, situaciones como el "perdonazo" a Lionel Messi tras sus duros insultos a un árbitro asistente luego de recibir cuatro partidos de sanción que luego fueron reducidos a cero, causaron algo de pesimismo en jugadores como Claudio Bravo o Marcelo Díaz que expresaron en más de una oportunidad su preocupación al respecto.

El 5 de julio tuvo lugar la audiencia en Lausanne, Suiza, en la que todos los implicados entregaron sus posturas en una sesión que se extendió por poco más de cinco horas y tras la cual la FBF auguró por medio de un comunicado firmado por su presidente Marco Peredo, quien renunció el recién pasado miércoles por problemas internos en la liga boliviana.

La prensa argentina, sobre todo, especuló mucho con el tema propiciado en parte por las declaraciones del presidente de la AFA Claudio Tapia quien se mostró optimista en cuanto a revertir el fallo de la FIFA.

En la ANFP, en tanto, siempre fueron cautos respecto a la resolución final del Tribunal asegurando que esperarían el momento confiados en que sus argumentos fueron lo suficiente mente sólidos para hacer valer su postura, algo que finalmente quedó en evidencia con la resolución del TAS.