El estadounidense Jon Jones dio positivo por esteroides en su victoria ante Daniel Cormier en el UFC 214 y le quitaron el título semipesado de la compañía más importante de artes marciales mixtas del mundo.

TMZ reveló este martes que Jones dio positivo por Turinabol, un esteroide anabólico, durante una prueba para su pelea del 29 de julio ante Cormier, donde ganó tras una brutal patada a la cabeza y una serie de puñetazos a la cabeza de su rival.

Es la segunda vez que Jones falla una prueba de la Agencia de Antidopaje estadounidense (USADA). La primera fue por tomar sustancias prohíbidas en 2016, antes del UFC 200 y fue sacado de la lucha principal, teniendo además un año de suspensión.

Esta vez, la sanción puede llegar a ser de cuatro años, mientras que el título de los semipesados de la UFC volvió a las manos de Cormier.