Real Madrid se consagró nuevamente como el mejor equipo de Europa. Los madridistas, guiados por un inspirado Cristiano Ronaldo, golearon por 4-1 a Juventus y se coronaron como bicampeones de la Champions League.

Los "merengues", que sumaron la duodécima "orejona" a su exitoso palmarés, entraron también a la historia al ser el primer equipo que gana el título en años consecutivos desde que el torneo cambió su formato en 1993.

El resultado de esta definición, Celebrada en Cardiff, Gales, también significó la segunda final que pierde Juventus en tres años, ya que en 2015, cuando Arturo Vidal integraba el equipo, cayó ante otro equipo español, FC Barcelona.  

El otro registro negativo es que también es la quinta vez que pierden una definición, ya que no celebran desde que ganaron ante Ajax en 1996.

Juventus fue más en el primer tiempo

Los bianconeros salieron con todo desde el pitazo inicial, ya que la intención era conseguir un trofeo que nunca ha levantado el mítico portero Gianluigi Buffon.

No obstante, a pesar del dominio claro, fueron los merengues, que jugaron de morado, los que asestaron el primer golpe, con una jugada colectiva que culminó Cristiano Ronaldo con preciso derechazo (20').

Juventus, sin dejar que el golpe se sintiera, mantuvo su propuesta ofensiva y tuvieron respuesta positiva tan solo seis minutos después, con una magistral chilena de Mario Mandzukic, figura en la ofensiva italiana.

Casemiro, Cristiano y Asensio decretaron la goleada

En el complemento, los pupilos de Zinedine Zidane se soltaron, tomando la posesión y las riendas del partido ante la "Vecchia Signora", que acusó el desgaste ejercido en la primera fracción.

Pasó la hora de juego y Juventus no pudo aguantar los embistes del Madrid, y Casemiro, con un espléndido derechazo desde 30 metros, devolvió la ventaja a su equipo (61').

Tres minutos más tarde, Cristiano aprovechó que las dudas italianas después del golpe y asestó el tercero, sentenciando el destino de los turineses (64').

Finalmente, en el desenlace, el joven Marco Asensio liquidó el partido ante un equipo desgastado, sin ideas y con un elemento menos, ya que Juan Guillermo Cuadrado fue expulsado pocos minutos antes por un entrevero con Sergio Ramos.

Con este triunfo, Real Madrid firmó su doblete en la temporada, ya que también ganó la liga española, hito que no lograba desde 1958. Además, garantizó su presencia en dos competiciones: La Supercopa de Europa, donde tendrá que jugar con Manchester United; y el Mundial de Clubes de la FIFA.