El futbolista de Universidad Católica Stefano Magnasco en entrevista con el sitio web de Cruzados se mostró "arrepentido" por lesionar al volante de Audax Italiano Eduardo Navarrete, quien terminó con un esguince grado dos en su rodilla derecha.

"Estoy muy triste y le di mis disculpas (a Eduardo Navarrete). No fue mi intención, fue una jugada de fútbol. Estuve muy pendiente el fin de semana de su evolución y gracias a Dios no fue lo que se decía, que era muy grave", declaró el jugador del cuadro estudiantil.

Además, agregó que "estoy arrepentido, pero no soy un jugador agresivo. Estoy tranquilo porque no fue con la intención de agredir a un compañero de profesión. Él entendió que fue una jugada de fútbol, lo hablamos y está tranquilo".

El lateral de la UC no pudo ofrecerle disculpas el mismo día debido a que los ánimos después de la agresión de Sebastián Pol a un hincha "cruzado" estaban muy tensos. Sin embargo, pudo obtener el número de celuar del joven valor "itálico" y lo llamó.

"Me conseguí su número, me comuniqué con él y le ofrecí las disculpas del caso: de que fue una jugada de fútbol y que no tuve la intención de agredirlo", señaló Magnasco.

La expulsión del sábado pasado fue la primera en su carrera y lo dejó sin poder jugar el clásico ante Colo Colo, por lo que dijo: "Estoy muy triste por eso, pero el que juegue lo hará bien".