El capitán del equipo chileno de Copa Davis, Nicolás Massú, dejó atrás la serie ante República Dominicana y ya piensa en el duelo de julio próximo ante Colombia, como local, y aseguró que pese a que el cuadro "cafetalero" cuenta con el favoritismo, eso se acaba al momento de entrar a la cancha.

"Siempre hay favoritismo, para el uno o para el otro, pero ese favoritismo se acaba cuando uno entra a la cancha. Colombia ha estado peleando el repechaje al Grupo Mundial, con un equipo unido, con varios buenos jugadores, a quienes conozco mucho, pero faltan cuatro meses. Nosotros debemos pensar en llegar a esa serie lo mejor preparados. Ojalá todos los jugadores sigan desarrollándose, sigan subiendo el ranking y sumando buenos resultados en el circuito", dijo Massú en diálogo con El Show de Al Aire Libre en Cooperativa.

Massú comentó su labor al mando del equipo chileno en estos años de capitanía: "Se hizo un gran trabajo. Comenzamos de abajo. Estábamos en una división (Grupo 2 Zona Americana) donde nadie quería estar, y ahí empezamos juntos a Marcelo Ríos a trabajar, siendo muy joven, y motivando a los más jóvenes. Hasta ahora con muy buenos resultados, con cinco series ganadas de manera consecutiva", dijo el ex campeón olímpico.

"Pero queda todavía mucho por hacer. Tenemos un grupo muy unido, pero independiente de los resultados, sabemos que es un trabajo a largo plazo. Si seguimos ganando, increíble; y si llegamos a perder, hay que seguir trabajando", añadió.

El equipo y su visión como técnico

Massú se refirió al momento de los jugadores del equipo nacional, como Hans Podlipnik, Gonzalo Lama y Christian Garín, y cree que tienen potencial para seguir escalando posiciones.

"Hoy hay jugadores muy parejos de ránking y uno siempre piensa que tienen que hacer su desarrollo. Unos maduran antes que otros. Lo importante es que sigan trabajando. Nosotros hablamos siempre con sus entrenadores y tratamos de ayudarlos. Ojalá podamos seguir madurando como equipo. Potencial hay, pero depende de cada uno el como afronta las distintas carreras, que como sabemos, son muy solitarias", dijo.

Massú fue consultado respecto a sus expectativas como entrenador y aseguró que apunta a estar dentro de los mejores del mundo, así como lo estuvo cuando fue jugador.

"Ser capitán es distinto a ser jugador. El punto final es el común dominador que tiene que ver con ganar. A mí me gusta saber como mejorar, si no estoy haciendo bien las cosas, espero seguir mejorando, saber por qué las cosas no me salen. Y eso me ayudó en mi carrera a la hora de buscar el éxito como jugador", dijo.

"Ahora, llevo dos años como capitán, fue un paso bastante rápido, y ahora me pongo como meta ser uno de los mejores entrenadores del mundo. Estoy siempre motivado, veo televisión, veo tenis, sigo los resultados, quiero volver a estar en los torneos importantes", añadió.