El vicepresidente y gerente general de Santiago Morning, Luis Faúndez, explicó la petición de descenso, que junto a otros seis clubes de la Primera B, solicitaron a la Asociación Nacional de Fútbol Profesional para Iberia, debido a sus incumplimientos financieros.

Según el dirigente "microbusero", el propio tesorero del organismo rector del fútbol chileno, Aldo Corradosi, desmintió que la tienda sureña haya pagado su derecho a participar en la Primera B, debido a que lo hicieron con un cheque al cual le dieron orden de "no pago".

"El delegado de Iberia, en el último Consejo donde asume el nuevo directorio, ratificó en público, en pleno Consejo, que tenían cancelada la deuda y fueron desmentidos enérgicamente por el tesorero actual, Aldo Corradosi, pues tenían un cheque para el 31 de diciembre y dieron orden que el cheque no tenía fondos y no podía ser cobrado", señaló Faúndez a Al Aire Libre en Cooperativa.

"Si hay un cheque para el 31 de diciembre, está fuera de todo plazo estipulado y además dieron una orden de no pago, porque no tiene fondos. Entonces fueron desmentidos por el señor Corradosi, tesorero actual de la ANFP, pues no han cancelado a la ANFP lo que les correspondía cancelar", agregó.

Debido a dichas razones, Faúndez aclara que la petición es para que Iberia pierda la categoría y descienda a la Segunda División.

"Lleva dos años compitiendo sin haber pagado, en dos años si no lo hicieron, no le veo vuelta al tema, porque aunque pagara ahora, está extemporáneo, corresponde que ocupen el último lugar de la tabla, porque así lo dicen las bases, y descienden en forma automática", cerró.

A traves de una carta de 11 puntos, apoyada por los clubes Coquimbo Unido, Deportes La Serena, Unión San Felipe, Deportes Copiapó, Deportes Concepción, Santiago Morning y Barnechea, se señala que el equipo sureño no canceló en las fechas establecidas el pago de su inscripción en la categoría, tras su ascenso desde la Segunda División el año 2014.