El mandamás de la Federación de Tenis de Chile, José Hinzpeter, finalmente presentó su renuncia al cargo este sábado, pero seguirá en él hasta que se elija a un nuevo presidente de la institución y abogó para que el proyecto que lideran Marcelo Ríos y Nicolás Massú continúe.

En declaraciones emitidas a La Tercera, Hinzpeter aseguró que habló "personalmente con Marcelo (Ríos) y probablemente nos vamos a tomar un café el lunes. También hablé con Nicolás (Massú) muchas veces, y estoy seguro de que este proyecto no tiene que terminar, tiene que seguir".

"No sólo confío, sino que les he pedido que se mantengan, y se van a mantener, porque van a tener el apoyo de los que vengan. No es posible que alguien piense que le quiten peso a Marcelo o a Nicolás, sería un error", añadió.

Prosiguió apuntando que "estamos en el Grupo I Americano y tenemos el equipo de Copa Davis más joven de todos los que participan. Hay que seguir manteniendo todas las cosas que se están haciendo".

En tanto, recordó que "llegamos con un presupuesto de 300 millones de pesos, hoy el presupuesto es de 1.300 millones. Tenemos más de 20 jugadores en el ranking ATP, cuando llegamos habían cinco; fuimos campeones panamericanos, se hizo la Asamblea Mundial de Tenis con 220 países. Los hechos hablan por sí solos y hoy el tenis nacional está en una muy buena posición, reconocido por el IND y la ITF"

Lamentó la falta de "un court central en el norte y en el sur. No puede ser que tengamos sólo el Estadio Nacional. También faltó reactivar el tema de los menores y el tenis en regiones. Por eso propuse una reforma de estatutos para tener obligatoriamente tres dirigentes de regiones en el próximo directorio para que estén representadas".