Los equipos de República Checa y Rusia, que este fin de semana disputarán en Praga la final de la Copa Federación, comenzaron a entrenar este martes en el Estadio O2 Arena.

"Ya tengo el espíritu de la 'Fed Cup' en la cabeza, y con la proximidad de la final será más fuerte", afirmó la checa Petra Kvitova, sexta jugadora del mundo, después de entrar en contacto con la cancha, que fue construida la víspera tras el concierto del fin de semana de Madonna en la capital checa.

"He visto que todavía salta algo de tierra, y la pista no es la definitiva", añadió Kvitova, que fue la artífice de la victoria el año pasado aquí, frente a la Alemania de Angelique Kerber, contra la que consiguió el tercer y decisivo punto.

La única jugadora checa que aún no se ha incorporado al equipo es Karolina Pliskova, once del mundo y finalista el domingo pasado en el torneo de Zhuhai, China,, donde cayó ante Venus Williams.

Además de Kvitova y Pliskova, forman parte del equipo local, que capitanea Petr Pala, Lucie Safarova (9 WTA) y Barbara Strycova (41)

En el equipo ruso estaba todavía ausente Maria Sharapova, cuarta del mundo.

Sus compañeras son Ekaterina Makarova (23 WTA), que ha estado ausente de las pistas por lesión desde el US Open, Anastasia Pavlyuchenkova (28) y Elena Vesnina (111).

Las rusas, capitaneadas por Anastasia Myskina, asistieron la víspera a la ópera Rusalka en el Teatro Nacional y este martes probaron la pista.

Ambos equipos se han enfrentado cinco veces en este torneo de naciones, con una balance de 3-2 favorable a las checas, incluida la victoria de 2011 en Moscú.

Las locales, que defienden el título, son el segundo equipo más exitoso del torneo después de EE.UU., con ocho victorias, tres de ellas obtenidas en los últimos cuatro años.