La FIFA aseguró que todos los preparativos para el Mundial de Clubes que se celebrará en Marruecos del 10 al 20 de diciembre próximo "continúan según lo previsto", ya que "no se ha detectado ningún caso de ébola" en ese país.

"La FIFA está siguiendo la situación, en estrecho contacto con las autoridades marroquíes, y actualiza constantemente su posición de acuerdo con las orientaciones técnicas de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En caso de que la situación cambie, nos pondremos en contacto con los clubes participantes en ese sentido", indicó.

En un comunicado, la entidad afirmó que "la salud de los jugadores, los directivos y los hinchas sigue siendo la principal prioridad, como en todos los torneos".

"La Comisión de Medicina de la FIFA seguirá analizando la evolución de la enfermedad y adoptará las medidas apropiadas para proteger a las comunidades y los deportistas", añadió.

La FIFA apoya la decisión de la Confederación Africana de Fútbol (CAF) de organizar los partidos internacionales de los países que están experimentando actualmente una transmisión intensa de la EVE (Liberia, Sierra Leona y Guinea) en campo neutral.

Igualmente se pronunció a favor de que las concentraciones previas a los encuentros internacionales de las selecciones de los tres países de alto riesgo se lleven a cabo en campo neutral y que se aisle y se someta a análisis de detección a los deportistas o personas de su entorno que puedan mostrar síntomas relacionados con el Ébola.

La FIFA también recomendó que "los futbolistas y las personas del entorno de los países que están experimentando una transmisión intensa se supervisen a sí mismos, lo que incluye tomas diarias de temperatura, para detectar síntomas relacionados con la Enfermedad por el Virus del Ébola".

Igualmente pidió que antes de los partidos internacionales en los que participe uno de los tres países de alto riesgo se conciencie a los aficionados de los equipos acerca de la prevención del Ébola y que tras éstos, los clubes que hayan cedido a sus jugadores, los sometan a un chequeo médico