Kevin Love, el jugador más deseado por más de una docena de equipos de la NBA, se perderá por una decisión personal el Mundial de España, ya que le resulta incierto su futuro profesional.

El ala-pivote de Minnesota Timberwolves, afirmó que no quiere correr riesgos de lesionarse en el torneo que comienza el 30 de agosto, dado que negocia su traspaso.

La USA Basketball, a través de un comunicado, informó que Love no acudirá a la concentración del equipo en Las Vegas (Nevada) a partir de este domingo.

"Debido a su actual estatus, Love no estará con el resto de los jugadores seleccionados que mañana, domingo, se van a incorporar al campo de entrenamiento", dice el comunicado oficial.

La baja de Love se suma a las de Blake Griffin, de Los Angeles Clippers, y LaMarcus Aldridge, de los Trail Blazers de Portland, anunciadas la semana pasada.

A pesar de las tres ausencias, el director general de la USA Basketball, Jerry Colangelo, declaró en entrevista con ESPN.com, que no se harán nuevas incorporaciones al equipo, que ahora cuenta con trece jugadores, aunque a España sólo podrán viajar doce.

"No puedes sentarte y lamentarte por lo que no tienes", comentó Colangelo. "Debes pensar en lo que tienes y lo que puedes hacer, con la confianza que vamos a realizar una gran labor, aprovechar la oportunidad y demostrar que estamos preparados para el reto".

Sin Love, Griffin y Aldridge en el equipo de Estados Unidos, la pintura queda en manos de cuatro jugadores jóvenes y de una calidad bastante inferior, según lo visto en la pasada temporada: el pívot DeMarcus Cousins (Sacramento), los ala-pivotes Anthony Davis (New Orleans), Andre Drummond (Detroit), y Kenneth Faried (Denver).