El presidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), Wolfgang Niersbach, se refirió al polémico baile de un grupo de seleccionados alemanes en el que, además, cantaban refiriéndose a los argentinos como gauchos.

"Sé por Oliver Bierhoff -manager de la selección- que la idea surgió espontáneamente en medio de la emoción y la alegría", justificó el directivo.

"Todos son gente absolutamente decente, que en ningún caso pretenden reírse de nadie, sino que dieron rienda suelta a sus ganas de festejar... Lamentamos que haya sido malinterpretado por algunos", añadió al respecto.

Por su parte varios medios germanos lamentaron lo sucedido en los festejos por la obtención de la cuarta Copa del Mundo de los teutones.

"La fiesta ante la Puerta de Brandeburgo derivó en un gigantesco gol en propia puerta", enfatizó el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung, uno de los más influyentes de Alemania.

En esa misma línea el diario Der Tagesspiegel calificó la danza de acto "de mal gusto", de una "absurda escenificación" y de una "falta de respeto" hacia el rival.

Por el contrario, el conservador Die Welt apuntó que tampoco hay que sacar de quicio una "tontada", mientras que el diario "Bild", el más leído de Europa, prefirió no tocar el tema en las varias páginas dedicadas a la bienvenida de los campeones.