La Comisión de Deportes del Parlamento uruguayo debatirá este martes, con la presencia de la ministra Lilián Kechichián el alcance de las competencias de la FIFA y su aparente "impunidad" al calor de la sanción que impuso al jugador Luis Suárez, que despertó la indignación de todo su país.

Según explicó a EFE el diputado Horacio Yanes, del oficialista Frente Amplio y responsable de haber pedido este debate, la idea de este llamado es abrir un foro de "reflexión" sobre ciertas "condiciones de la FIFA que sobrepasan en muchos casos las legislaciones nacionales" y que la convierten en una entidad "impune en la práctica".

Este debate que se abrirá en la Comisión de Deportes también convocará en los próximos días a responsables de la Cancillería, de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) y de la Mutual de Futbolistas Profesionales del Uruguay.

"Si bien el disparador de este llamado es el caso Suárez, que para los uruguayos fue ver a un compatriota prácticamente deportado de Brasil por la FIFA, y que prácticamente fue una violación a sus derechos de libre reunión, lo que queremos es reflexionar y analizar cómo esta organización puede ostentar tanto poder", apuntó el legislador.

La sanción que la FIFA impuso a Suárez el pasado 25 de junio por morder al italiano Giorgio Chiellini durante un encuentro del pasado Mundial de Brasil 2014 implicó además de una dura sanción económica, cuatro meses de inhabilitación para jugar y nueve partidos internacionales, su expulsión inmediata del torneo y la prohibición de entrar en los estadios en los que se disputaba el campeonato.

"La FIFA también prohibió que los uruguayos entraran a los campos con caretas de Suárez, lo que puede ser una violación al derecho de libre expresión, y pudo presionar para que Brasil cambiara su legislación sobre el consumo de alcohol en los estadios", anotó el diputado al señalar otros "abusos" del órgano rector del fútbol mundial.

Yanes apuntó que para Uruguay, que aspira a organizar el Mundial de 2030 junto con Argentina para festejar el centenario de la primera Copa del Mundo que se realizó en Montevideo, es momento de "preguntarse qué condiciones de la FIFA el país estaría dispuesto a aceptar".

"La FIFA es una multinacional muy poderosa. Existen tribunales internacionales para juzgar todo lo que hacen los Estados, pero la FIFA no puede ser investigada, es un universo aparte. Solo queremos reflexionar sobre eso", añadió.

Desde que saltó el caso de deportista, el Gobierno uruguayo mostró su solidaridad con el mismo y criticó la actuación de la FIFA, al tiempo que se puso "a las órdenes" de los abogados Suárez para lo que pudieran necesitar.

Uno de los más duros contra el organismo fue el propio presidente José Mujica, que tildó de "manga de viejos hijos de puta" a sus directivos.