Con un gol en la recta final del partido, Bélgica venció por 1-0 a Rusia en el Estadio Maracaná y aseguró su paso a los octavos de final del Mundial de Brasil 2014 en el Grupo H.

No fue un buen encuentro, pero los últimos 10 minutos del partido contuvo gran parte de la ofensiva belga, que terminó celebrando ante los pupilos de Fabio Capello.

En la primera etapa el encuentro partió con buen ritmo, lo cual hacía augurar un encuentro entretenido y con llegadas en ambos arcos. Pero con el paso de los minutos, tanto Thibaut Courtois como Igor Akinfeev se convirtieron en meros espectadores del encuentro.

El primero en trabajar algo fue el arquero de Bélgica, tras un potente remate de Victor Fayzulin. Luego, Dries Mertens se escapó un par de veces por la banda derecha y puso en problemas a la defensa rusa, aunque las jugadas terminaron en nada.

En los últimos minutos se vio más activo en ofensiva a Alexander Kokorin de Rusia, pero la dupla compuesta por Vincent Kompany y Daniel van Buyten contuvieron sin problemas los embates ofensivos rusos.

En la segunda parte, Rusia fue más. Primero tuvieron una buena chance en los pies de Denis Glushakov, pero mandó su remate por sobre el pórtico de Courtois. Y luego comenzó a relucir el arma más peligrosa de Bélgica: el contragolpe.

Rusia se mostró contenida gran parte del partido para evitar que la velocidad de los volantes ofensivos belgas les causara problemas, pero ya cuando se acercaba el final del encuentro, Capello mandó al ataque a sus jugadores, lo que le terminó costando el encuentro.

Esto porque Edin Hazard, que había estado muy opaco en todo el partido, comenzó a hacer de las suyas. Primero un remate desde un tiro libre que dio en el poste, luego un par de desbordes peligrosos que lograban desactivar a tiempo la defensa rusa.

Hasta que llegó el gol. Hazard tomó el balón por la izquierda, hizo una pared con Divock Origi, se infiltró en el área y logró sacar un centro atrás, que finalmente conectó Origi (87') para marcar el único tanto del encuentro.

Tras el gol, los rusos no tuvieron reacción y le terminaron entregando el pasaje a octavos al elenco de Marc Wilmots, ex delantero de la selección belga y figura en la última presentación de los rojos en mundiales: Corea y Japón 2002.

Bélgica quedó como líder del Grupo H con seis puntos, a la espera de lo que hagan Argelia y Corea del Sur, en el siguiente partido del grupo. En tanto, Rusia se enredó en el grupo, ya que se quedó con un punto, obtenido en el empate ante los coreanos en la primera fecha por 1-1.