El Autódromo Jose Carlos Pace de Sao Paulo se robará toda la atención del "mundo tuerca", ya que Sebastian Vettel (Red Bull), al que le basta con ser cuarto para coronarse campeón, y Fernando Alonso (Ferrari) protagonizarán la batalla final por el título de la Fórmula 1 en el Gran Premio de Brasil.

Tras 19 carreras, sólo dos pilotos luchan por el Campeonato Mundial y las pistas del circuito de Interlagos acogerá el desenlace en donde Vettel corre con la ventaja.

Las combinaciones para que el piloto alemán se corone campeón son que acabe la carrera entre los tres primeros; si finaliza quinto, sexto o séptimo y Alonso no gana; o si el español no sube al podio.

En tanto, Alonso aunque no se cansa de repetir su mensaje optimista, para volver a teñirse de gloria (fue campeón con Renault en 2005 y 2006) debe ganar la carrera y Vettel tiene que terminar quinto o más atrás; si acaba segundo y el germano es octavo como mucho; o si concluye tercero y su rival acaba décimo o fuera de los puntos.

Son resultados difíciles, más aún por la regularidad del piloto alemán y su monoplaza, aunque el asturiano se afianza a tres factores que pueden servirle para conseguir el triunfo: el clima, la confianza desmesurada de Red Bull y la esperanza de poder dar la sorpresa, que sería histórica, más aun en el último Gran Premio del año.

Lluvia en la carrera y hechos que marcarán
En las últimas horas afloró una jugada caída del cielo, que puede ayudar al español. Los pronósticos indican alta probabilidad de lluvia para el domingo, una circunstancia que nivelaría las fuerzas permitiendo a Alonso lanzarse al ataque.

Además, existirán varios condimentos que rodearán la carrera y que ayudarán a llamar la atención de muchos fanáticos.

El primer elemento es que la carrera dejará un nuevo tricampeón y que además estará el alicientes de la lucha entre Kimi Raikkonen (Lotus) y Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes) por la tercera posición del Mundial.

Otro factor interesante es la despedida del piloto más laureado de la historia, Michael Schumacher (Mercedes); y quizás la posible última carrera de HRT, que necesita un inversor con urgencia para no abandonar la Fórmula 1.

La carrera comenzará a las 13:00 horas de Chile (16:00 GMT) y los pilotos darán un total de 71 vueltas a un circuito de 4,309 kilómetros para un total de 305 kilómetros en lo que consistirá en la última carrera de la temporada 2012 y la celebración de la edición 40 del Gran Premio de Brasil.