La tenista chilena Andrea Koch (276ª de la WTA) vio frustrado su estreno absoluto en las clasificaciones de un torneo WTA al caer por un doble 2-6 ante la puertorriqueña Mónica Puig (189ª).

La número uno de Chile llegaba con la oportunidad de acercarse por primera vez al cuadro principal de un certamen del circuito, pero la superioridad de la caribeña fue evidente.

Koch estará otras ocho semanas en México y Estados Unidos disputando challengers y clasificaciones de la WTA, para luego defender a Chile en la Copa Federación.

Tras el partido, la chilena comentó a través de Twitter su conformidad pese a la derrota, puesto que se sintió bien de una lesión que arrastra desde el año pasado.

"Me sentí muy incómoda hoy en la cancha, se me notó la falta de competencia con una buena jugadora. Rescato que mi muñeca está perfecta", escribió en la red social.

"Para mi eso era lo más importante, probarla en competencia. A principios de este año estuve muy asustada porque el dolor no se iba y hoy puedo decir que la lesión definitivamente quedó atrás. Debi eso sí seguir jugando vendada y con una serie de cuidados", añadió.