El estadounidense Steve Stricker firmó una primera tarjeta con 63 golpes en el Campeonato de la PGA, el último de los 'Grandes' del año que se juega en el Atlanta Athletic Club, en Estados Unidos, e igualó el mejor registro de la historia de los Majors.

Stricker rozó penetrar en la historia de los grandes torneos pues disfrutó de un último putt para birdie y firmar 62 golpes, pero erró el toque a 4,5 metros del hoyo.

Fue la undécima vez que un jugador firma un 63 en el último major del año y la 25ª ocasión en total.

"Me di cuenta que era para 62 pero no me di cuenta que era para la historia", dijo Stricker.

"Pegué un buen putt. Pero simplemente no entró. En general, fue un buen día", dijo.

Y sin dudas fue un buen día para el quinto mejor jugador del mundo, quien lidera con siete bajo el par el torneo.

A dos golpes (65) quedó su compatriota Jerry Kelly, completando el doblete de vanguardia en una contundente ofensiva de los golfistas estadounidenses.

El también estadounidense Tiger Woods se estrelló en el estreno, tras un desastre sin precedentes en su carrera profesional.

Tiger, que regresaba a un 'Grande' después de tres meses de baja por lesión, selló su peor tarjeta para una ronda inaugural en un 'major'.

Sus 77 golpes (siete sobre el par) fueron la triste evidencia de una de sus peores jornadas de golf.