Para Matías Sborowitz (31° de la ITF) el momento de la verdad ha llegado a nivel junior. Desde que comenzó su carrera como juvenil aspiró a disputar los torneos de Grand Slam en categoría 18 años y este domingo se dará el gusto en Roland Garros, donde aún espera conocer a su rival en primera ronda.

"He entrenado todo el año para esto. Todos los torneos que he jugado ha sido para llegar a Roland Garros", indicó a Cooperativa.cl el tenista nacional que será el único chileno en el cuadro principal tras la eliminación de Benjamín Ugarte y Gonzalo Lama en la fase clasificatoria.

Sborowitz inició la temporada obteniendo el título de la Copa Milo (Grado 2), pero la falta de tenis en el mes de abril le pasó la cuenta con derrotas en el Trofeo Bonfiglio en Italia y en el Astrid Bowl en Bélgica, caídas que lo hicieron perder algunos peldaños en el ranking junior pero no su enfoque.

"A principio de año me fue bien, después estuve un tiempo sin jugar, entonces vine a Europa y estaba un poco falta de partidos. Vengo trabajando mucho mi parte sicológica, porque el tenis no es solamente pegarle bien a la pelota. Hay que ser muy fuerte mentalmente y eso es a lo que más énfasis le estoy dando", señaló.

Para el pupilo de Horacio de la Peña el objetivo es "terminar entre los 10 mejores del mundo en juveniles y meterme rápido en el profesionalismo", lo que le permitiría ganar cinco wild cards para torneos Futuros.

Tras Roland Garros, Sborowitz viajará a Alemania a disputar dos torneos. Más adelante en su itinerario destacan Wimbledon y US Open junior, los Futuros chilenos y el Orange Bowl para cerrar la campaña 2011.

"Me siento muy identificado con Ferrer y Nadal"

Para Sborowitz hay dos jugadores con los que se ha sentido identificado desde pequeño. Estos son los españoles Rafael Nadal (1°) y David Ferrer (7°), quienes se caracterizan por su tenis aguerrido.

"Me siento muy identificado con Ferrer y Nadal. Más que imitarlos, porque yo tengo mi propio estilo de juego, pero los admiro mucho ya que mi juego es parecido al de ellos y son lo que me gustaría llegar a ser algún día", admitió.

Sborowitz sabe que aún le queda mucho para alcanzar todo su potencial, pero se siente seguro con las armas que posee: "Mis fortalezas son que físicamente estoy muy entrenado, tengo una derecha que hace mucho daño, un revés muy parejo que lo he trabajado demasiado y un saque que tiene una gran proyección y que hoy en día es muy bueno".

Finalmente, el jugador de 17 años confía en que el tenis chileno sacará nuevos prospectos con el potencial suficiente para acercarse a los logros obtenidos por Fernando González y Nicolás Massú durante sus carreras.

"Más que preocuparse si hay o no hay recambio, tienen que apoyar para que haya. Hay jugadores que juegan muy bien como Gonzalo Lama, Benjamín Ugarte, Bastián Malla, (Christian) Garín y que algún día pueden llegar a ser muy buenos", reflexionó.