Máximos dirigentes de la ANFP fueron acusados de irregularidades en sus antiguos clubes
Reportaje de Zoom Deportivo acusó a Sergio Jadue y Mauricio Etcheverry de estafa y millonarias deudas en La Calera y La Serena, respectivamente.
El diputado Gabriel Ascencio aseguró que los dirigentes de la ANFP deben renunciar a sus cargos
Sergio Jadue y Mauricio Etcheverry, presidente y vicepresidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional, ANFP, fueron acusados de dudosas gestiones durante su permanencia en la dirigencia de los clubes La Calera y La Serena, respectivamente.
De paso, al sucesor de Harold Mayne-Nicholls se le imputan millonarias deudas y multas previsionales, más varias irregularidades en los balances del conjunto "cementero".
La situación de Mauricio Etcheverry sería más compleja, ya que durante su gestión al mando de Deportes La Serena solicitó al municipio loacl varios millones de pesos para mejorar la "Parcela 41" y así convertirlo en un lugar destinado para el fútbol joven del club.
Según asegura un informe sobre los resultados de las obras, el club sólo cumplió con uno de los 21 objetivos en los cuales el dinero iba a ser gastado, por lo que no ha habido respuesta sobre en qué se invirtió dicha plata.
Además, se acusa a Etcheverry, quien estuvo cuatro años al mando de la Sociedad Anónima que administra a los granates, de no pagar las imposiciones de jugadores y cuerpo técnico entre 207 y 2008, generando una deuda cercana a los 62 millones de pesos.
Ante esta situación, el diputado DC Gabriel Ascencio, miembro de la comisión de Deportes de la Cámara, aseguró que los dirigentes de la ANFP deben renunciar a sus cargos, y calificó como graves las denuncias formuladas. A juicio del parlamentario, los hechos inhabilitan a ambos para seguir al mando del órgano rector del fútbol nacional.
"Ellos deben considerar la posibilidad de renunciar inmediatamente para no seguir haciendo daño al fútbol chileno", sostuvo el legislador a El Mostrador.
"Las imputaciones por estafas, giro doloso de cheques, deudas previsionales y tributarias, amenazas, en contra de estos dirigentes son tan graves que éticamente hacen imposible que ellos continúen al mando de la institución", señaló el político.
"En caso de que estas personas persistan en mantenerse en sus cargos, debe ser el Tribunal de Honor el que analizando los antecedentes los inhabilite para continuar a cargo de la ANFP", aseguró.