Ex médico de Francia reveló que en 1998 hubo "análisis de sangre sospechosos"
El facultativo aseguró en un libro que exámenes de varios campeones mundiales mostraban anomalías.
"Los análisis de sangre revelaron anomalías en varios 'bleus' justo antes del Mundial de 1998. Se podían tener grandes sospechas cuando se sabía los clubes en los que jugaban algunos jugadores, especialmente en los del campeonato de Italia", escribió Jean-Pierre Paclet, ex facultativo de la selección nacional francesa en su libro "L'Implosion".
El doctor, encargado de los servicios médicos en el Mundial de 2006, asegura que "no habría sabido qué hacer" si hubiera estado en el lugar de Jean-Marcel Ferret, que trabajó con la escuadra gala que ganó el Mundial de 1998. Se enfrentó a "un caso de conciencia", aseguró.
Sin embargo, Ferret se defendió y, preguntado por el diario, aseguró que se efectuaron "decenas de análisis" para detectar "EPO y otras sustancias ilícitas".
"No encontramos nada. Hubo dos ligeras anomalías en relación con la tasa de hematocrito, pero vinculadas al cansancio del campeonato", agregó el responsable médico de Francia en 1998, quien dijo tener "la conciencia tranquila".
En 296 páginas, Paclet explicó que aquel asunto se convirtió en una "cuestión de Estado" y sugirió que si se hubieran investigado los análisis, tal vez se habrían encontrado pruebas de dopaje.
"Tener una tasa de hematocrito elevada no prueba el consumo de EPO. Como no había pruebas, no les molestamos", añadió el doctor en una entrevista publicada el mismo día en el que su libro salió al mercado y en la que aseguró que sólo dice "lo que todo el mundo sabe".
Paclet apuntó directamente a Juventus, donde jugaban entonces Zinedine Zidane y Didier Deschamps y donde era "de dominio público que en la época se realizaban prácticas por lo menos al límite".
Sin embargo, el médico no señaló directamente a los seleccionados franceses que provenían de aquel club y se limitó a decir que estaban "expuestos" porque jugaban en el elenco turinés.
Otras revelaciones
El médico reveló además riñas y antipatías entre jugadores del actual equipo nacional, episodios en los que Patrick Vieira insistía para que se le aplicara un medicamento prohibido en Francia para intentar recuperarse a tiempo de una lesión y disputar la Eurocopa de 2008 y capítulos en los que Lilian Thuram se borraba de un partido con la selección.
Y por supuesto, recogió el motín mundialista de Sudáfrica bajo las órdenes de Raymond Domenech, a pesar de que se produjo dos años después de que dejó el combinado galo.
A pesar de las revelaciones del libro (revisado por la editorial para evitar procesos legales), Paclet aseguró que no tiene "la sensación de ser un traidor" y que su objetivo es sólo explicar "como funcionaba y como sigue funcionando el fútbol francés".