El entrenador de la selección argentina, Diego Armando Maradona, pasa sus días confinado en su residencia de Ezeiza, en las afueras de Buenos Aires, mientras medita su continuidad como en el cargo como adiestrador de la "albiceleste" tras la dura eliminación en cuartos de final del Mundial de Sudáfrica.

Según el diario Perfil, el ex futbolista "casi ni se asoma al portón de su casa" y "sólo pisó la calle el martes por la noche" al salir con su automóvil hacia un sitio desconocido, del que "regresó rápidamente".

"Su terapia de encierro incluyó visitas de la familia de su novia (Verónica) y algún partido de tenis en la pista que Diego hizo construir durante su estadía en Sudáfrica", revela el rotativo.

Perfil destacó que a Maradona "se le vio de buen humor" y que este viernes incluso "se prendió en un picado (partido) de fútbol" que se organizó cuando llegaron algunos jóvenes amigos del hermano de su novia.

A una semana de la aplastante derrota ante Alemania por 4-0 cada vez son más fuertes las versiones de la prensa deportiva que señalan que el actual técnico continuará al frente del equipo al menos hasta la Copa América que se disputará en 2011 en Argentina.

No obstante, algunos medios sostienen que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) pedirá al entrenador que haga cambios en su equipo de colaboradores.

Uno de ellos, Héctor Enrique, habló en las últimas horas y respaldó la continuidad de Maradona en la selección.

"Ojalá que Diego siga. No lo digo para continuar trabajando con él, sino que lo digo con el corazón. De todos los técnicos que trabajaron al lado mío, de Maradona es del que más aprendí por su forma de llegar a los jugadores", declaró.