El seleccionador brasileño, Dunga, no podrá contar con Elano este viernes en el partido de cuartos de final frente a Holanda, por culpa de un edema óseo en un tobillo que podría impedir que el jugador vuelva a vestir la camiseta verdeamarilla en lo que queda de Mundial.

"Elano tiene un edema óseo", confirmó el médico de la selección, José Luis Runco, que compareció a una conferencia de prensa junto al volante.

El ariete sufrió la dolencia en el segundo partido del Grupo G frente a Costa de Marfil, y aunque ha evolucionado favorablemente, una evaluación clínica descartó su presencia en los cuartos, lo que podría extenderse al resto del torneo.

"La recuperación puede durar días, una semana o un mes. Hasta el final de semana Elano se limitará a hacer trabajo físico", explicó Runco, que quiso aclarar que el jugador no padece rotura alguna, pero que de momento se siente "incómodo" e "inseguro" sobre el terreno de juego.

"No existe señal clínica de incapacidad pero él siente incomodidad", aclaró el galeno, quien señaló que las posibilidades de que el mediocampista vuelva a representar a Brasil en Sudáfrica pasan por la respuesta del futbolista al tratamiento de fisioterapia y a la medicación que se le está administrando.

La amargura del jugador

"Quiero estar al ciento por ciento, pero infelizmente no puedo", dijo por su parte Elano, que ya sabe lo que es marcar en el Mundial y que no quiso compadecerse por el hecho de sufrir una lesión.

"Tengo la certeza de que volveré a ayudar a la selección. No estoy aquí para lamentarme", señaló el volante.

La baja de Elano trastocó los planes de Dunga, que tampoco podrá contar con su sustituto natural, Ramires, que cumplirá frente a Holanda un partido de sanción por acumulación de cartulinas amarillas, lo que probablemente abra la puerta del once inicial a Dani Alves.