El estratego de la selección francesa, Raymond Domenech, se mostró abatido tras caer 2-0 ante México por la segunda fecha del Grupo A en el Mundial de Sudáfrica. Con ese resultado, los galos quedaron con pocas opciones de avanzar a la segunda ronda. 

"No tengo palabras. Es una verdadera decepción para todos los que creyeron en este equipo. Ha habido buenas intenciones, combinaciones de mérito, pero hay algo que no ha funcionado", indicó el seleccionador luego del cotejo. 

Tras calificar como "decepcionante" el resultado, señaló no saber qué decirle a sus dirigidos. "Queda un partido y todavía es posible un milagro. Ahora tenemos que ser duros y jugar por el honor, todavía quedan cosas en juego y tenemos que reaccionar", dijo sobre su próximo duelo contra el país anfitrión. 

Domenech también puntualizó que su escuadra aún tiene cosas por demostrar en ese partido, el que puede ser el último al frente de la selección, pues tras el Mundial dejará su cargo a Laurent Blanc,  "pero cuando se depende de otros, hay poco que decir. Estoy abatido", confesó.

Francia debe derrotar por un marcador holgado a los "Bafana-Bafana" y esperar un resultado distinto al empate entre México y Uruguay.