En definitiva la Intendencia de Santiago impidió que U. Católica pueda jugar como local en el Estadio San Carlos de Apoquindo contra U. de Chile, válido por la Copa Libertadores y programado para el próximo 11 de marzo, debido al cambio de mando presidencial que se hará ese mismo día. Además, el organismo le solicitó a los "cruzados" trasladar el partido fuera de la Región Metropolitana y de Valparaíso.

El Intendencia, en un comunicado dirigido al Gerente General de Cruzados SAD, Felipe Achondo, informó que "solicitó a la entidad que haga las gestiones necesarias para que el match programado para el 11 de marzo próximo, entre dicho equipo de fútbol y Universidad de Chile, se realice en otra región del país y no en el Estadio San Carlos de Apoquindo".

La intendencia fue directa e instó a los cruzados a "solicitar hacer las gestiones a fin que dicho partido sea jugado en otra fecha, o en una localidad que se encuentre ubicada fuera de la Región Metropolitana (o la Quinta Región)".

"Teniendo especialmente en vista que el partido en cuestión es de alta convocatoria, no estarían dadas las condiciones necesarias para que ambos eventos (cambio de mando y clásico universitario) se realicen el mismo día, en condiciones óptimas, de forma tal que no se afecte mayormente la tranquilidad y orden público", señala el documento.

El escrito culminó puntualizando que "sin perjuicio de lo anterior, se solicitará a Carabineros de Chile informe de factibilidad para la realización en el Estadio San Carlos de Apoquindo, tanto de este partido, como del previsto para enfrentar al Club Social y Deportivo Colo Colo".

El choque ante los albos, válido por el Torneo de Apertura,  está programado para el próximo 23 de marzo.