El puntero izquierdo de la selección chilena Mark González se integró a las prácticas del combinado nacional en el Complejo Deportivo "Juan Pinto Durán" con la idea de comenzar la etapa final de su recuperación tras la lesión que sufrió el 10 de octubre, cuando Chile selló su clasificación al Mundial ante Colombia.

González llegó al búnker para realizar trabajo físico y este martes tendrá contacto con el balón, puesto que su fase de recuperación está en pleno desarrollo.

"Está todo dentro de lo esperado, fueron las primeras dos semanas después de la operación en Alemania y está todo muy bien. Estoy bastante avanzado y mañana (martes) me integraré al equipo para hacer trabajo con la pelota", dijo el jugador de CSKA Moscú.

"Disfrutando un poco de las vacaciones y no dejar de lado la recuperación, que para mí es muy importante, porque tengo que llegar al 100 por ciento con el equipo a Rusia, así que no puedo dejar de lado la recuperación", añadió.

González se mostró "más que ansioso" por volver a jugar, aunque dijo que quiere "tomarlo con mucha tranquilidad".

"Las lesiones de este tipo hay que tomarlas con calma, son complicadas y quiero recuperarme lo mejor posible para poder estar en el Mundial. Por eso hay que ser muy profesional y esperar más e lo esperado, hay que hacerlo", dijo.

"Vuelvo en una semana a Rusia para poder integrarme al equipo y esta rehabilitación es para poder volver con el equipo y en el primer partido, ya podría estar jugando", añadió.

Respecto a los rivales de Chile, Mark González fue cauto. "Sabemos que es un grupo difícil, pero accesible y depende de nosotros y tenemos que seguir demostrando lo que hicimos en las clasificatorias, aunque sabemos que es distinto. Todos los partidos son claves porque un mundial es distinto", dijo.